Sociedades de Vittorio Arrigoni y Gabriel Ruiz-Tagle arremeten contra Antonio Jalaff por venta de Patio
Sus vehículos de inversión tienen prendadas cuotas de un fondo que enajenará su participación en la empresa. Acusan menoscabo y advierten de acciones legales.
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Al cierre de 2023, la familia Jalaff, fundadora del Grupo Patio, acordó su salida de la firma inmobiliaria. Tras verse salpicados por sus vínculos con los hermanos Sauer, protagonistas del caso audios-Factop, los hermanos decidieron vender su porcentaje a los otros accionistas de la empresa: Eduardo Elberg y las hermanas Gabriela y Paola Luksic; esta última, junto a su marido, Óscar Lería.
El trato se cerró tras un aumento de capital al cual no asistieron los Jalaff, diluyendo su participación en Patio. Por factores como las elevadas tasas de interés de los activos de renta inmobiliaria, la valorización determinada para esta compraventa fue un 44% más baja que en el aumento de capital anterior, suscrito en marzo de 2023.
Previamente, los Jalaff y los Elberg-Luksic ya habían puesto fin al pacto de actuación conjunta y tanto Álvaro como Antonio Jalaff habían dejado la compañía por distintos motivos. Ahora, a raíz de la venta de las acciones de Patio, las deudas de este último desataron un nuevo conflicto con sus acreedores.
Los préstamos
En una carta redactada por el estudio de abogados Cortés & Rodríguez -y firmada por sus socios Carlos Cortés y Sergio Rodríguez-, a la que tuvo acceso DF, dos sociedades acreedoras de Antonio Jalaff se opusieron a la compraventa de un porcentaje de las acciones de Patio y pidieron “abstenerse de ejecutar cualquier acuerdo de venta o cesión” de las mismas.
Se trata de Garko SpA, ligada a la familia del empresario Vittorio Arrigoni -además de Juan Antonio Guzmán y Laurence Golborne-, que entregó un crédito por US$ 1,5 millón a Inversiones San Antonio -vinculada a Antonio Jalaff- el 2 de septiembre de 2020; e Inversiones III, ligada a la familia del empresario y exministro de Deportes, Gabriel Ruiz-Tagle, que ese mismo día hizo lo propio por US$ 1 millón.
Junto con el crédito, ambas sociedades suscribieron un contrato de prenda sin desplazamiento sobre cuotas del Fondo de Inversión Privado 180 (FIP 180), del cual San Antonio cuenta con un 21,28% de la propiedad.
Si bien la principal sociedad de los Jalaff que venderá sus acciones de Patio es Santa Teresita, el FIP 180 también lo hará. Según la carta, que también está firmada por Arrigoni y por José Rodrigo Ruiz-Tagle (hijo del exministro) los papeles de esta firma son el “principal activo subyacente del referido FIP 180”.
Vale decir que este fondo es distinto al que creó LarrainVial con el fin de pagar las deudas del mismo Jalaff.
Las acusaciones
Así, la carta se dirige a la actual administradora de fondos (AGF), WEG Capital, apuntando a que, de concretarse la transacción, se estaría infringiendo con el deber de cuidado que tienen las AGF de velar por los intereses de quienes son partícipes de un fondo.
Asimismo, en relación a Antonio Jalaff, quien se constituyó como fiador y codeudor solidario para garantizar el cumplimiento del crédito, apuntan a que la Ley de Prenda sin Desplazamiento castiga al “deudor prendario que, tratándose de prendas de créditos o cualquier otra clase de derechos constituidos en prenda en conformidad a esta ley, defraude al acreedor prendario, ocasionando la pérdida o el menoscabo de los derechos otorgados en garantía”.
Los abogados advirtieron que esto último es un ilícito penal que se encuentra incluido dentro de los Delitos Económicos de segunda categoría en la nueva ley, “en la medida -como ocurre en la especie- que podría haberse ejecutado en beneficio de una empresa”.
La carta sostiene que “sin que exista razón o justificación alguna, FIP 180 ha procedido a acordar la venta de sus acciones en Grupo Patio SpA en un equivalente al 44% más bajo que el valor de las acciones del aumento de capital de fecha 30 de marzo de 2023”.
Una fuente cercana a los acreedores dice que jamás fueron consultados por las decisiones que se tomarían respecto a las cuotas del fondo sobre las cuales tienen derecho de prenda y plantea que debió existir una junta de tenedores. Incluso, asegura que se enteraron del acuerdo de compraventa por la prensa.
Otra fuente ligada a estas mismas sociedades sostiene que la carta quiere decir que, si se concreta esta transacción, los prestamistas podrían incluso iniciar acciones penales. Los vehículos de Arrigoni y Ruiz-Tagle son dos de los seis acreedores de Antonio Jalaff, pero son los únicos que tienen prendadas cuotas del FIP 180.
Un acuerdo ya firmado
Si bien la carta de los abogados va dirigida a la AGF, WEG Capital, en la última página también se copia a Gabriela y Paola Luksic, Óscar Lería y Eduardo Elberg, accionistas de Patio; Andrés Solari, presidente de la firma; Cristián Menichetti, quien hoy está como gerente general de Grupo Patio; Pablo Manríquez, ejecutivo que cumple el mismo rol en la filial Patio Comercial; y los hermanos Álvaro y Antonio Jalaff.
Fuentes conocedoras de la empresa afirman que esto no pone en duda la transacción entre los accionistas de Patio. Argumenta que el acuerdo ya está firmado y que, por ende, las responsabilidades con sus acreedores dependen únicamente de Jalaff.
Asimismo, las fuentes subrayan que en ningún caso Garko e Inversiones III podrían impedir el trato. Las advertencias de eventuales acciones legales, sostienen, no inciden en la compañía ni sus operaciones.